El Laboratorio de la Diputación ha concluido el informe del control de agua de las piscinas de verano públicas cuya gestión tiene encomendada por muchos municipios de la provincia y otras entidades. Durante la campaña 2020 se ha encargado del control sanitario de 24 piscinas públicas de la provincia: Abades, Aguilafuente, Ayllón, Bernardos, Boceguillas, Cabezuela, Cantalejo, Cantimpalos, Carbonero El Mayor, Cuéllar, La Losa, Mozoncillo, Muñopedro, Muñoveros, Prádena, Samboal, Sanchonuño, Sangarcía, Torrecaballeros, Turégano, Veganzones, Vegas de Matute, Club de Tenis Juan Bravo y Posada Rural Caserío de Lobones. El número se ha visto reducido aproximadamente a la mitad respecto al pasado año debido a la situación generada por la Covid-19.
Desde el organismo autónomo Prodestur se destaca el gran esfuerzo desarrollado por estas piscinas para la aplicación del Protocolo elaborado por Prodestur para minimizar el potencial de transmisión de COVID-19 y proporcionar un ambiente seguro y saludable en las instalaciones de cada piscina ya que ninguna de ellas ha recibido ningún expediente sancionador durante esta temporada. La preocupante situación sanitaria de este año había llevado a Prodestur a elaborar un documento en el que se recogían las normas para el uso de las instalaciones, detallando los procedimientos de limpieza, la desinfección, el control de accesos, aforos máximos permitidos, medidas higiénicas y medidas adicionales en el tratamiento del agua de los vasos. Con todo ello se pretendía minimizar los riesgos de transmisión de la Covid-19.
La campaña se ha desarrollado con normalidad, sin apenas incidencias reseñables y sólo se señala la presencia de un par de actuaciones puntuales respecto a los parámetros microbiológicos exigidos en el RD 742/2013 que fueron resueltas casi de manera momentánea siguiendo los protocolos de actuación que proporciona el Laboratorio de Prodestur.
Desde 2014 Prodestur hace el seguimiento y control sanitario de piscinas públicas de la provincia. Las pautas para realizar los trabajos vienen reguladas en el Real Decreto 742/2013, que contiene la normativa que deben cumplir las piscinas públicas en referencia a la calidad del agua y en el caso de piscinas cubiertas también contempla la calidad del aire. Los datos obtenidos proporcionan una información muy completa sobre el estado de las piscinas y su evolución en las distintas temporadas.
Para facilitar el trabajo al personal responsable de la piscina, se les ha facilitado también los formatos para los registros pertinentes en cada uno de los ámbitos a controlar (productos químicos, parámetros de control de rutina, limpieza y desinfección, accesos…), además de la cartelería que señala las normas a seguir para la prevención de contagios.
Además, como en años anteriores, Prodestur se ha encargado de realizar la toma de muestras y análisis correspondientes exigidos; de la elaboración, actualización y mantenimiento del Protocolo de Autocontrol de la Piscina y de volcar los informes de resultados en una plataforma de información de piscinas llamado SILOÉ, sistema de información sanitario implantado a nivel nacional, en el que se recogen y procesan los datos de las piscinas de uso público que están operativas en España. Una vez procesada la información, la plataforma genera avisos que sirven para la detección y prevención de riesgos en el uso y disfrute de las piscinas municipales.