Durante los días 11 al 14 de septiembre se celebrará una nueva edición del Ciclo de cine «Otras miradas, un mismo lenguaje». Este año está dedicado al cine brasileño.
Las películas, facilitadas por la embajada de Brasil, se proyectarán a las 19.00 horas en el Salón de actos del Ayuntamiento. La entrada es libre.
Día 11 de SEPTIEMBRE. O CONTADOR DE HISTÓRIAS.
Director: Luiz Villaça
Brasil, 2009; 100 minutos
SINOPSIS
El Contador de Historias relata la trayectoria de Roberto Carlos Ramos, un niño lleno de imaginación al que, en los años 70, su madre deja en una institución asistencial recién creada por el gobierno. A los trece años, después de numerosas fugas, se le clasifica como “irrecuperable”. A pesar de ello, la pedagoga francesa Margherit Duvas, que va a Brasil a realizar un estudio, Roberto representa un desafío. Determinada a hacer del niño el objeto de su estudio, se intenta aproximar a él. Lo que surge entre los dos es una relación de amistad y ternura, que pondrá en jaque la falta de credibilidad de Roberto en su futuro y desafiará las convicciones de Margherit.
Dia 12 de SEPTIEMBRE. TRABALHAR CANSA.
Director: Juliana Rojas y Marco Dutra
Brasil, 2011; 99 minutos
La joven ama de casa Helena decide realizar su antiguo deseo de poner un negocio: un pequeño supermercado. Para ocuparse de las tareas domésticas y para cuidar de su hija contrata a Paula. Cuando el marido de Helena pierde su trabajo como gerente de una gran corporación, las relaciones personales y de trabajo entre los tres personajes sufre una inversión inesperada, al mismo tiempo en que ocurren cosas perturbadoras que amenazan el negocio de Helena.
Día 13 de SEPTIEMBRE. SANEAMENTO BASICO, O FILME.
Director: Jorge Furtado
Brasil, 2007; 112 minutos
Una pequeña comunidad de descendientes de inmigrantes italianos en el interior del estado de Rio Grande recurre a hacer un video para tratar de resolver los problemas de saneamiento básico que afectan a su aldea.
Día 14 de SEPTIEMBRE. VERÔNICA.
Director: Mauricio Farías
Brasil, 2012; 91 minutos
Después de 20 años de enseñar en el sistema escolar público, agotada e impaciente, a Verônica ya no le encantan los estudiantes, tal como estaba al principio de su carrera. Un día en la escuela, Verônica se da cuenta de que nadie ha venido a recoger a Leandro, un niño de 8 años, y decide llevarlo a casa. Sin embargo, cuando ella llega a su favela, ella descubre que los narcotraficantes han matado a sus padres y están detrás de Leandro. Ella sabe que no puede dejarlo allí, por lo que Verônica huye con el niño.
