El Centro Santo Domingo alberga desde el 31 de julio una triple exhibición de piezas artísticas de gran interés. Cerámica que dialoga con los muros de nuestro Centro, obra de Alejandro F. Espejel, y que expresa la maleabilidad de la vida y del mundo, su adaptabilidad a nuestros deseos y también a lo que nos constriñe. Fotografía que no lo parece, pero que lo es, a cargo de Paloma Gómez, quien se empeña, con formatos grandes, en intrigarnos hasta que vemos la fotografía de lo que llama la atención como si fuera otro formato, con bellas perspectivas. Escultura, por fin, utilitaria y bella al mismo tiempo, a cargo de José Álvaro, heredero de saberes de maestro forjador y carpintero. Estará a la vista del público hasta el 31 de agosto. No se lo pierdan.