La arquitectura serrana y medieval de Riaza y Ayllón reciben la visita del ciclo ‘Viajero, yo te enseñaré Segovia’ Riaza con su arquitectura serrana y la villa medieval de Ayllón fueron los destinos en los que recaló el pasado fin de semana el ciclo ‘Viajero, yo te enseñaré Segovia’, el programa de visitas guiadas que organiza Prodestur, organismo de Turismo de la Diputación. Los guías Leticia González y Mariano Vela fueron los encargados de contar a los participantes los principales atractivos y curiosidades del patrimonio turístico de ambos pueblos. La villa riazana fue la encargada de recibir a los visitantes, que se dieron cita en la Plaza Mayor, con sus característicos soportales y aún utilizada como coso taurino. Seguidamente, el grupo paseó por el casco urbano y se detuvo en la conocida calle Cervantes para admirar la típica arquitectura serrana. Después fue a contemplar la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Manto. El templo, ubicado a espaldas del edificio del Ayuntamiento, es un impresionante conjunto renacentista, fechado entre finales del siglo XV y mediados del siglo XVI, con planta rectangular de cruz latina, ábside, dos capillas, torre campanario, sacristía y baptisterio. Posteriormente, la expedición se trasladó a palpar el ambiente medieval de Ayllón, iniciando la visita en el arco medieval que preside la villa junto al puente románico a orillas del Aguisejo para adentrarse a continuación en el casco antiguo, con sus empedrados y casas blasonadas como la de los Contreras o Palacio del Obispo Vellosillo, un edificio de fachada renacentista que alberga la Biblioteca y el Museo de Arte Contemporáneo de Ayllón. La comitiva llegó posteriormente hasta la Plaza Mayor con la visita a la iglesia de San Miguel, que fue la principal desde el siglo XII, cuando comenzó su construcción, hasta 1902, año en que fue suprimida para el culto. Después, se accedió a la de Santa María la Mayor, de estilo neoclásico, construida entre finales del siglo XVII y comienzos del XVIII y que cuenta con un majestuoso campanario de 40 metros de altura rematado en espadaña. Taller de cuero Puesto que la filosofía del programa, aparte de apreciar el patrimonio de cada pueblo, es conocer los comercios e industrias o artesanos más representativos, la jornada finalizó con parada en el taller de cuero ‘El hada Leanan’ de Ayllón, donde los integrantes del grupo pudieron conocer de primera mano el proceso de tratamiento y trabajo artesanal con piel. A los participantes también se les facilitó un listado de los distintos establecimientos en los que pueden hacer parada y fonda una vez concluida la visita en un radio de veinte kilómetros. La iniciativa ‘Viajero yo te enseñaré Segovia’ trata de potenciar y poner en valor la labor de los guías turísticos oficiales de la provincia, expertos conocedores de todos sus secretos y recursos históricos, arqueológicos, monumentales, paisajísticos o museísticos y que están oficialmente cualificados para mostrarlos. La próxima visita guiada del ciclo está programada para el próximo sábado 28 de noviembre y hará un recorrido por las llamadas Villas de los Obispos: Turégano y Aguilafuente. En la primera localidad se contemplará la Iglesia de Santiago, y el popular castillo fortaleza entre otros lugares de interés para después desplazarse a la villa del Sinodal para ver para ver las antiguas casas palaciegas como la de los Pérez de la Torre, la de las Conchas, los restos del Palacio del Marqués de Aguilafuente, el exterior de la Iglesia de Santa María o el Aula Arqueológica en la iglesia de San Juan. La visita a la quesería artesanal de Celestino Arribas de Escalona del Prado, completará la jornada. La petición de reservas puede tramitarse enviando un correo electrónico a la dirección Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.. La inscripción es de tres euros y los desplazamientos al lugar de partida de la visita deben hacerse en coche particular. Hay que tener en cuenta que, ante las nuevas restricciones de movilidad, los grupos se reducen a un número de cinco personas más el guía, como ocurrió en esta pasada visita, en lugar de diez como en semanas anteriores.