El 'hobbiton' de Segovia está en Fuentidueña

El 'hobbiton' de Segovia está en Fuentidueña

El 'hobbiton' de Segovia está en este pueblo amurallado que es conjunto histórico artístico.

Apenas suma un centenar de habitantes; pero por él han pasado reyes que han dejado un rico patrimonio monumental y más de una sorpresa escondida en medio de un paraje natural extraordinario.

En Segovia saltan las sorpresas en cada rincón del mapa: un pueblo por el que solo se puede entrar y salir por el mismo lugar; otro que tiene más buitres que personas, iglesias que son murallas, también un palacio digno de los Borbones… Según cómo se vea, la provincia encarna algo así a un realismo mágico y rural. Podría parecer que pocas singularidades más quedan por descubrir, cuando de pronto te das con Fuentidueña. Un pueblo con un centenar de habitantes. Y, sin embargo, tiene castillo y murallas, una necrópolis fabulosa, un ábside románico viajero e, incluso, unas curiosas bodegas que parecen casitas de los “hobbits”.

Este pintoresco pueblo, que fue declarado Conjunto Histórico-Artístico el 8 de marzo de 2017, es un lugar cuya tranquila apariencia podría hacer que pasara desapercibido su largo linaje histórico en el que caben vestigios de celtas, romanos, judíos y árabes. Un conjunto de monumentos, leyendas y curiosidades que compiten además en atención con bellos parajes como las Hoces del río Duratón. La “Señora de las Fuentes”, como apunta su nombre en latín Fontis Donna, es mucho más que un curioso lugar donde el tiempo parece haberse detenido, es la constatación de que para seguir sorprendiéndonos con los viajes hay que tomar algún que otro desvío en el mapa “oficial” del turismo.

Un castillo que se subastó por 25.000 pesetas

Fuentidueña se encuentra a unos 80 km de la capital. Conforme te aproximas, la silueta de la muralla se recorta sobre una suave pendiente. Junto a ella, las fantasmales ruinas del castillo y una iglesia. Es desde aquí arriba desde donde hay que comenzar a visitar esta villa que antaño fue el centro de una de las Comunidades de Villa y Tierra más importantes. Quienes se aventuraban a repoblar estas duras tierras disfrutaron a cambio de un régimen especial de privilegios reales.

Aunque deteriorada por el pasar de los siglos, la cara sur de la muralla es actualmente la más pintoresca. Aquí se encuentra la Puerta de Alfonso VIII o de Trascastillo como preámbulo al castillo que permanece épico en el mismo lugar desde el siglo XII. Esta fortaleza fue testigo de episodios clave en la historia, como el testamento que aquí otorgó Alfonso VIII en 1204, tras la batalla de las Navas de Tolosa. El castillo también recibió la visita de Alfonso X, el Sabio, y de Sancho IV. Ninguno de ellos habría podido sospechar que en el futuro esa privilegiada fortaleza que vieron sus ojos iba a ser prácticamente regalada, subastada en los años 70 del siglo XX por tan solo 25.000 pesetas.

 

fuentiduena_18c4e153_499386590_250115131859_1280x853.webp

 

Fuente: Viajes. National Geographic