Castillo de Turégano, la fortaleza en la que estuvo preso el secretario de Felipe II Es el momento más que perfecto para conocer todos los detalles del Castillo de Turégano, una de las grandes joyas que podemos encontrar en la provincia de Segovia. No es ningún secreto que España cuenta con una gran cantidad de castillos. Es el momento de viajar a la provincia de Segovia, concretamente a la villa de Turégano. En ese mismo punto encontraremos una fortaleza que data del siglo XII, y es uno de los más impresionantes que podemos encontrar en Castilla y León. Debemos tener en cuenta que el Castillo de Turégano está situado en un lugar verdaderamente estratégico: sobre una colina que domina la villa. Tanto es así que, con el paso de los años, se ha convertido en la imagen que más representa a esta localidad. ¡Y no es para menos! Esta construcción ha sido testigo de grandes hechos históricos. El promontorio en el que está emplazado destaca por su importancia defensiva. De hecho, ya era utilizado para tal fin en la época de los celtíberos. Debemos tener en cuenta que, en este mismo punto, hubo una construcción de carácter medieval que presentaba varias torres. Se dice que su origen era árabe. De esta época tan solo se conservan algunas de esas torres, así como diversos muros de la parte norte del Castillo. Un nombre importante en la historia de esta fortaleza es Pedro de Agén. Este obispo, a finales del siglo XII, tomó la decisión de iniciar la construcción de nada más y nada menos que una iglesia, en honor a San Miguel. Precisamente utilizando esta edificación como referencia, a partir del año 1471, se decidió erigir esta fortaleza. En esta ocasión, la iniciativa la llevó otro obispo, Arias Dávila. Se trata de un castillo que, con posterioridad y en diversas ocasiones, decidieron ampliar. De hecho, en el siglo XVI, se tomó la decisión de perfeccionar la fortaleza con imponentes muros. Todos ellos estaban acondicionados para armas de fuego. Además, se decidió reforzar con un elemento más: varias torres cilíndricas. Muchos son los rostros conocidos de la historia que han pasado por este lugar. Uno de los que más hondo ha calado es, sin lugar a dudas, el secretario del rey Felipe II. Y es que Antonio Pérez fue encarcelado en esta fortaleza, allá por el año 1585. Los que estaban a su favor decidieron trazar un plan para poder hacer efectiva su fuga. Entre otras cuestiones, decidieron establecerse en Muñoveros, un pueblo cercano a Turégano. Aunque consiguieron entrar en la fortaleza, el alcalde consiguió interceder para que dejaran a las autoridades hacer su trabajo. Otros dos años importantes en la historia del Castillo de Turégano son el 1703 y el 1994. El primero de ellos, porque se remató la fachada sur de la fortaleza con una imponente espadaña barroca. El segundo año, porque la Diócesis de Segovia tomó la decisión de conceder al Ayuntamiento del municipio el uso del castillo, a excepción de la Iglesia de San Miguel. La Iglesia de San Miguel, la construcción que también debes descubrir Recordemos que fue la base en la que se erigió el resto de la fortaleza. Consta de nada más y nada menos que tres naves, siendo las laterales las más antiguas. Éstas se construyeron en el siglo XII y destacan por ser de estilo románico. En cuanto a la central, no solamente cuenta con una bóveda de cañón apuntada sino que el estilo, en este caso, es el gótico. Fuente: Viajestic La Sexta